|
|
El tiempo se escapa al
final del abismo El mismo que hemos
construido y destruido Inventado y reinventado Pareciendo inertes Al no darnos cuenta del
silencio De la soledad de nuestro
planeta Tan increíblemente
cercano de la muerte. Y biológicamente puro Como nuestras células
muertas El revés de nuestra alma No se compara con el
dolor del mundo Que tiene lágrimas de
pena Por los hombres y su vida
refundida Entre ideales estúpidos De religiones hundidas Y llantos inverosímiles De mentes perdidas. |
|
|