Ficha
Técnica:
Páginas: 424
Fecha de edición: octubre
de 2010
Autor: Sergio
Torrijos
Editorial: Ediciones
Atlantis
Encuadernación: Rústica
con solapas.
Formato: 15
x 21 cm.
Precio: 22€
ISBN: 978-84-92952-72-4
Sinopsis:
La raza de los enanos se enfrenta con los orcos y trolls, sus
sempiternos enemigos, por la recuperación de la ciudad de Gryt, en
su origen ciudad enana que les ha sido arrebatada por los orcos. La
recuperación no será fácil y, como en toda lucha,
aparecerán rivalidades y desacuerdos.
Boras, valiente guerrero enano, se verá obligado a dejar su
comunidad y crear una nueva. En ella demostrará su capacidad
organizativa y de liderazgo, estableciendo relaciones y alianzas con las
comunidades vecinas.
Anales de tierra goda es una novela de aventuras y acción donde
las escenas de combate, de un gran realismo, son contadas de forma
increíblemente visual y plástica.
Crítica:
El escritor Sergio Torrijos, quien, además, es colaborador de esta
misma revista, nos invita a descubrir las maravillas y los horrores de
Tierra Goda con su libro “Anales de Tierra Goda: La maldición
del mithrill”.
Lo primero a señalar es que, cuando se empieza el libro, el
argumento suena un poco extraño a los seguidores del género
fantástico. Seamos sinceros: libros sobre humanos, sobre
elfos… ¿pero sobre enanos? Casi nadie se ha parado a dar el
suficiente protagonismo a esta raza tan peculiar, quizá por el hecho
de que es una versión más pequeña (aunque más
fuerte) de los humanos.
Sin embargo, Torrijos no sólo coge el toro por los cuernos sino que,
además, nos lo cuenta todo desde una perspectiva como yo no he
leído ninguna parecida. Pero no nos impacientemos y volvamos al
comienzo de la historia.
La saga, porque se trata del primer libro de una saga, versará
alrededor de Boras, un enano joven pero muy alto y corpulento que
acompaña a muchos de su raza en la reconquista (o intento de ella)
de la antigua ciudad de Gryt, que perdieron hace décadas frente a
los orcos.
Lo cierto es que el principio engaña y a la vez sorprende. Nos
muestra cómo los enanos consiguen controlar estancia tras estancia,
con una estrategia que pocos hubieran pensado que tendrían. Las
descripciones de las peleas están a la altura, y cada una de las
batallas tiene algún detalle que la hace única.
Aunque está escrito en primera persona, Boras no es el único
narrador (aunque sí el mayor protagonista). También leeremos
la perspectiva de otro enano, Per, y de un semi-enano, Tarek. Esto
ayudará a poder ver desde varios prismas los acontecimientos que
ocurrirán en las más de 400 páginas.
Pero, como ya he dicho, Torrijos nos engaña con un principio tan
distinto de lo que, luego, resulta ser el resto de la obra. Boras, por
ciertas desavenencias con los mandatarios de la contienda, se verá
obligado a marchar con un pequeño número de enanos. Y, con la
ayuda del elfo Fendolan, encontrarán otro lugar donde establecer su
nuevo hogar.
El libro, pues, trata de cómo Boras y sus compañeros empiezan
a crear una ciudad enana desde el comienzo de los comienzos: en una gruta
en medio de la montaña. En un terreno de nadie, entre diferentes
reinos y sitios poblados por gente de todo tipo. Conforme vamos avanzando,
vemos como nuestro ya querido enano tendrá que afrontar todas las
ventajas y adversidades que se pueda imaginar nuestro lector. Y, con ellas,
madurará y aprenderá a ser lo que ya todos ven en él:
un líder como no ha habido otro igual en mucho tiempo.
Es bastante loable la capacidad de Torrijos para conseguir que el
espectador no pierda el interés en ningún momento, ni se
pierda en el enjambre de nombres de personajes, ya que nos lo va
presentando conforme van llegando: poco a poco. Muchos pensarán que
puede llegar a ser aburrido que se cuente hasta los ínfimos detalles
de cómo evoluciona una ciudad de la nada, incluso recalcando casi
cada trato que se hace con los vecinos, cada pequeño problema con el
que puedan encontrarse.
De hecho, eso es parte del encanto de la obra. Consigue que enganche al
lector, pues éste quiere saber qué es lo próximo que
ocurrirá, cómo lo solventarán y, también,
qué se cuece en el resto de Tierra Goda y las implicaciones que
tendrá la creación de esta pequeña ciudad.
Y todo esto se encontrará envuelto en una sugerida y lejana nube de
oscuridad que, poco a poco, se va cerniendo sobre Tierra Goda. De hecho, el
final vuelve a ser batalla en grandes proporciones, para satisfacer a los
lectores más bélicos.
Pues, aunque la acción vaya avanzando poco a poco, da la
sensación de que no sobra ninguna de sus páginas, puesto que
todas y cada una de ellas aportan a la trama mucha más profundidad.
La disputa entre Per y Boras es un poco exagerada… pero el autor
acierta al no crear a un protagonista perfecto, puesto que puede tomar
decisiones equivocadas, y también tener manía a quien no
debería.
Pero no todo es bueno en la obra: sobretodo al principio, se nota que se ha
echado en falta la presencia de un editor que arreglara el uso de los
signos de puntuación y alguna que otra falta de ortografía.
Aunque esto luego mejora bastante, al principio la lectura adolece de una
mala utilización de las comas y los puntos, que estropea el ritmo en
más de una ocasión. Nada que se pueda arreglar en la
próxima edición.
En suma, un buen libro que entretendrá y enganchará a todo
fan del género fantástico. Despertará en todos los
lectores el deseo de que salga pronto la secuela, para poder ver
cómo prosiguen las aventuras de Boras y sus compañeros. Un
soplo de aire fresco y una promesa de muy buenos ratos. Lo recomiendo.
Calificación: 3 estrellas y media
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