|
|
Libro
de título alucinante y contenido no menos. No sé bien que te esperas cuando
descubres un libro con este título, de un japonés al que no conoces, de una
cultura que supones lejana y ajena, pero
desde luego nada es como te lo esperas. Es
el primer autor japonés que leo y me esperaba una lectura más serena, más
“oriental”, en cambio he pasado tres semanas detrás de un García Márquez
japonés dónde lo que parece sueño es realidad y la realidad es sueño. Para
mí, lo mejor de este libro son las historias dentro de historias que contienen
a su vez otras historias como en un juego de muñecas rusas interminable, y los
personajes. Los personajes son cercanos y extraños a la vez, están muy bien perfilados,
realizan los actos más extraños pero te parece que es lo único “normal” que
podrían hacer. Y
no sé qué es lo que buscaba Murakami con esta
historia, a mí lo que me decía todo el tiempo es que la “normalidad” es un
engaño y que lo que llamamos personalidad es sólo una capa más de la cebolla. Y
tal vez parezca esto algo místico, pero ni la historia ni los personajes lo son
en absoluto. Este
libro lo recomendaría sin ninguna duda a cualquiera que desee recuperar el
viejo gusto de leer, de que te cuenten historias al oído mientras te recuestas
en la cama, y buscaré más libros de este autor, y me acordaré de los
traductores de japonés al castellano que parece que hay bien poquitos, y tal
vez me tenga que plantear aprender japonés para seguir disfrutando de este
nuevo y maravilloso descubrimiento. |
|
|