Entró
a la calle Morgue y se impresionó, cuando vio venir a
Auguste
Dupin; con el poeta Edgard Allan Poe.
Enseguida
supo que ¡él iba a ser asesinado!
Las
ventanas en la calle se cerraron, y todo se oscureció.
Cruzó
una lechuza espantando el cielo.
Entonces
¡sonaron dos disparos!
Dos
sombras corrían hacia las murallas…
¡Pero
no tenían pies!
La
luna estaba roja.
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