El testamento
Melissa Ardan Rojas



La idea de escribir

un testamento hoy,

que contenga

los asuntos "inconclusos "

de ayer,

con un efecto "directo"

el día de mañana

me parece

genial

Siguiendo

el consejo de

Don Mario Benedetti,

esto podría convertirse

hasta

en costumbre,

podríamos dia a dia,

analizar lo logrado,

darle vueltas en la cabeza

a todo aquello

que quisiéramos hacer hoy,

y podríamos ver,

punto por punto

el posible "legado".

 

Y dándole vuelta

en la cabeza

me doy cuenta:

que yo me he pasado la vida

dando mi tiempo a otros

¿no sé tú?

 

Yo me he pasado trabajando

y metiendo mi plata en el bolsillo de otros.

¿no sé tú?

 

Yo me he pasado viendo que “otros” sean felices

que “otros” tengan paz y serenidad

¿no sé tú?

 

Hoy que ya pasamos el medio siglo

me estoy cansando

ya es hora de mandar a todo el mundo

a la porra y me dejen tranquila un tiempo

¿no sé tú?

 

Déjenme pensar un tantito en mí

gozar de un tiempo

para mí nomás,

para que escuche yo

a “Carreras”,

que mi alma se deleite

infinitamente

con su voz

para que encuentre yo mi paz,

mi tranquilidad

me tomaré una copa de vino

en mi balcón

y pensaré para variar,

en alguna persona querida

la haré presente en mi mente y en mi corazón,

me imaginaré la luz

de su mirada

y la dulzura de su rostro.

Aprendaré al fin a ser yo misma.

¿no sé tú?