Besos sueltos para un oído
María José Mures



Cae se deshace La belleza

nunca se pierde El silencio

no da tranquilidad hoy

Aguanto la cabeza con dolor

Es lo que no digo

el agua calentó mi piel y el silencio

continuaba su eco Nos vamos deshojando

nos vamos

perdiendo

poco a poco

ahogándonos

Cuando todo se agota y quedan vestigios

es la agonía un regalo

Los días como pétalos en mi mano están

qué hacer con tanta muerte…