Destierro
Washington Daniel Gorosito Pérez



El mundo se envuelve

en su manto de tiempo.

 

Por doquier hay lágrimas rojas,

de sangre inocente,

meticulosa sangría del futuro.

 

Feroces fisuras

presenta la humanidad,

maduran los cartuchos

y

duermen los pájaros.

 

Enormes cicatrices nos cubren,

y

el hombre incólume

cual mole de granito

acata el grito brutal

con impotencia.

 

Se esperan vientos,

que alejen esta cruel realidad

de destrucción activa

y

que no arranquen

de los espíritus,

secretos guardados en el gran libro

de la memoria humana.

 

Pasa el tiempo

y

se opaca la luz…

 

Hay un río de lágrimas

que el cielo

derrama sobre nosotros

buscando despertar las últimas esperanzas

desterradas en el sueño.

 

Quieto se queda el mundo

sólo escucha,

nudos que se cierran con lenta agonía,

de pájaros sobrevivientes.

 

En un mundo sin presencias,

ungido por un llanto sin lágrimas.

 

Confusión, desorden y desaliento,

en el destierro humano.