Nos dimos el adiós
Edgar Tarazona Angel




Anoche… por fin, nos dijimos adiós

… ya no quedaba nada.

Sin embargo, durante años,

fingimos el amor que no sentíamos

por conveniencia.

Nada queda.

El poco afecto ya pasó al olvido;

las horas de pasión desenfrenada

son un recuerdo que pronto pasará

con la ayuda de otros brazos

Y otros besos

Y otros cuerpos

Y otras bocas que pronuncien

las palabras de amor tan repetidas

siempre entre enamorados…

Quedan los versos que una vez brotaron

por la emoción del instante.

Las fotos, todas,

en mil pedazos

volaron con el viento de la tarde

hacia un nuevo amanecer sin nombres.

Al nacer el día

cada uno tomó su rumbo incierto

Sin un abrazo… ni un beso.

No hicimos promesas ni reproches

y las cenizas del amor de ayer

se esparcieron con los minutos

del último adiós…

Hasta el infinito.