Áspero el sinuoso
sendero,
en
la tétrica noche sin
estrellas
ascendemos
...
al
filo del abismo
artero,
la
agreste cima llama
como
sirena en celo que
clama,
que
canta ya alabanzas... Embrujadas…
Un viento gélido azota
la
frente en llamas,
altivo
el pecho desafía el
abismo,
tropezamos
, y el vacío se abre
como
una pupila fatal,
que
atrapara la luz...
En la caída, son las alas
que
nos salvan,
granítica
esperanza
de
cóndor que azota las
alturas,
el
mundo se sacude abajo,
En su finitud galopante,
Como hoja mecida por el viento.
Percibo la tristeza del
desarraigo,
las
manos mutiladas,
sangre
invadiendo el
acantilado,
la
agonía de los días de la
tierra...
Esta playa desierta; cubierta
de sal;
noches
sin pan, de los sin
rostro.
La diáspora eterna,
la
búsqueda de una luz en
el vuelo,
los
ojos mustios de los
desterrados,
manos
abiertas al infinito
vano,
el desdén, la impotencia,
La deshumanización
global,
Las vísceras a la
intemperie. ..
los
cuerpos abiertos de los
abandonados!
Las monedas miserables de
los victimarios!
La justicia torcida
Que defiende criminales,
Los corruptos
felices
En sus orgías infinitas;
Afuera hay un rebaño
dócil
Que cuenta los pájaros sobre
el jardín
Mientras la noche salvaje
avanza
Atemoriza y descuartiza.
El alma de una nación
Despedazada por el hambre
La pobreza y la muerte.
Una única calle conduce
A las fosas
comunes.
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